El pasado día 2 se celebró el acto de graduación de los alumnos de la Facultad de Comunicación y Documentación de la Universidad de Murcia (UMU). Tuve el honor de ser la madrina de la promoción de Periodismo y Documentación. Y fue inevitable rememorar mi tiempo de profesora en esa Facultad de Documentación, que se transformaría más tarde en Comunicación y Documentación. Y sé lo que costó ponerla en marcha y la ilusión que derrochamos los que tuvimos la fortuna de verla nacer en el curso 2002/2003.
Ilusión e infinita imaginación porque, a falta de medios (carecíamos de estudios de Radio y de TV para realizar las prácticas), había que derrochar inventiva que paliase esas carencias y un convenio con la Televisión Murciana vino a solucionar el problema al poder hacer las practicas de Radio, en TodoRadio, y las de Televisión en TVM.
Y allí nos juntábamos en esos encuentros que a mí me servían para conocer mejor a mis alumnos y alumnas, y a ellos para descubrir la magia del periodismo aplicado a la Radio y a la Televisión. Y es hermoso intentar hacer comprender a los alumnos, a las alumnas, que hacer periodismo, hacer radio y televisión, es lo más bonito del mundo, pero que hacer periodismo, radio y televisión, demanda mucha dedicación, mucha entrega, muchas ganas de trabajar, y de soñar también.
Pasado el tiempo, esos alumnos no han de salir de este centro para hacer las prácticas, porque la Facultad de Comunicación y Documentación de la UMU no ha parado de crecer en contenidos y en instalaciones, como lo demuestra el edificio de recursos audiovisuales en que los platós, los estudios de radio, la sala de realización y montaje, las cabinas de locución, han venido a llenar el vacío de aquellos primeros años en los que se carecía de todo y en los que el entusiasmo suplía esas carencias.
Porque esta Facultad no ha parado de crecer, y en ese crecer se encuentra la puesta en marcha de Gestión de Información y Contenidos Digitales. El Grado que empezó hace dos años y que en otros dos sustituirá al de Documentación. O ese otro Grado de nueva creación, que dará comienzo el próximo curso, Estudios de Comunicación de Medios, que se hará bilingüe y que será la primera Facultad en la que se ofrezca.
Son 1250 los estudiantes de este centro. 1250 que pueden cursar Master, Doctorado, cuatro Grados. Que pueden disfrutar de la mejora de espacios, del Aured, ese edificio que fue decisivo para que el año pasado la ANECA concediera a esta Facultad la Acreditación Institucional Internacional. Una acreditación de la que pocas Facultades pueden presumir. Y esta puede hacerlo, como un paso más para conseguir la excelencia que persigue.
En la imposición de Becas tuve el placer de ponérsela a una estudiante de raza negra, y fueron distinguidos también estudiantes cuyos orígenes están en Bolivia, Ecuador, Colombia, Argentina, Marruecos, Rumanía, Ucrania y Bielorrusia. Ciudadanos de segunda generación arraigados en nuestra tierra, que hablan nuestro idioma, que sienten como nosotros, que tienen las mismas preocupaciones que el resto de estudiantes que se graduaban con ellos. Disfruté de ese momento y me sentí orgullosa de haber pertenecido al grupo de profesores de esta Facultad que ha avanzado a marchas forzadas y que pone de manifiesto una interculturalidad que hace mejores a los alumnos, al tener la oportunidad de ponerse en contacto con diversas culturas, a través del diálogo y del respeto mutuo.
Y en esa ceremonia de graduación pudimos percibir ese respeto que ha de hacernos felices. Tan felices como todos ellos lo eran en ese momento.